Neuropsicología

¿Conoces la diferencia entre psicología y neuropsicología?

A pesar de que la psicología y la neuropsicología son parecidas y comparten muchos objetivos en común, también tienen grandes diferencias fundamentales. Es importante conocer sus diferencias para saber cómo se complementan y en qué momento se unen sus caminos.

Neuropsicología viene de Neurología, que es una especialidad médica que consiste en tratar los trastornos nerviosos. Seguidamente de psicología, ciencia que trata el comportamiento y los procesos mentales de las personas.

La psicología llegó con la finalidad de comprender al ser humano y de estudiar los procesos cognitivos, afectivos y conductuales. Como también para tratar específicos comportamientos en la persona y así aplicar técnicas para su recuperación y prevención de otras enfermedades mentales. Con el tiempo la psicología ha formado parte de distintas ramas según las especialidades.

En el caso de la neuropsicología, esta ciencia surge en busca de técnicas que ayudarán a entender el comportamiento de las personas que tenían alguna lesión en el sistema nervioso y así poder encontrar el mejor procedimiento para intervenir.

Entre las diferencias más notables que podemos mencionar entre la psicología y la neuropsicología encontramos que la psicología trabaja con pacientes que tienen un diagnóstico de trastornos de personalidad, emocionales y problemas de comportamiento; uno de los trastornos más comunes en el mundo es la ansiedad y depresión, ya que muchas personas la padecen o pueden llegar a padecerla a lo largo de su vida. Y el psicólogo los ayuda a que se conozcan mejor y a controlar de una manera positiva sus trastornos.

Por el contrario, la neuropsicología está enfocada en personas que sufren problemas de memoria, atención, lenguaje, praxias, trastornos de desarrollo, a su vez que trabajan con enfermedades mentales. Algunas de las enfermedades serían; Alzheimer, Parkinson, Epilepsia, Parálisis cerebral, demencia, esquizofrenia, trastorno obsesivo compulsivo, entre otros. Con la finalidad de recuperar la zona afectada o de buscar las estrategias correctas para aquellas lesiones que no se pueden recuperar.